Loas a los Justicieros de la Combi


Ya pasaron algunas semanas –para ser exactos ya un par de meses-- cuando en las benditas/malditas redes sociales se difundió un video, se viralizó dirán los neolingüistas, de como unos pasajeros le pusieron una “bonita madrina” a un ‘caco’ sin suerte, mientras la mayoría festejaba que se hiciera justicia por su propia mano a falta de la autoridad, otros intelectuales de escritorio que van desde la sociología-política-psicología-ecomonomía, etcétera, etcétera condebaban la actitud de los pasajeros que según ellos actuaron como viles y salvajes cavernícolas.  

Quienes habitamos y recorremos la Ciudad de México, otrora Distrito Federal, ya sea con un domicilio en una de sus populosas y densas colonias-barrios o bien haciendo un viaje mágico y misterioso desde lo muchos conocemos como el Estuche de México, el EdoMex o el Establo de México, como acabo de ver en un ‘meme’ (esos nuevos códigos de comunicación de esta era), sufrimos, padecimos y en ocasiones hasta gozamos de un asalto en el transporte público: Metro, taxi, microbus, combi, Ruta-100 o bien esos Chimecos-guajoloteros que nos trasladaban de nuestro lejano domicilio al trabajo o a la escuela.

En aquellos años aciagos e intensos años 90 en dos ocasiones me ‘talonearon’, la primera viajaba ya casi para amanecer hacia el Metro Indios Verdes, antes de dejar la Autopista Pachuca-México, en el bus en el que viajaba un trio de malandrines decidieron hacer el atraco, dos varones y una chava, uno sacó la “fusca” y sus compinches tuvieron que hacer esa labor de ‘cooperación voluntaria’, no hubo valientes, pero si mucha histeria y nervios, una chica se puso a llorar a raudales y otro amigo de nervios sonreía por tal motivo le dieron un buen ‘cachazo’, así que la sangre brotó a borbotones, yo que iba en la parte final del camión tratando de recuperar el sueño veía todo como un sueño, cuando la asaltante me pidió lo que llevaba pues yo sin pensarlo le dí lo que le traía una moneda de $1000.00, --antes que se le quitaran los tres ceros--, sí esa moneda en la que traía la imagén de Sor Juana, dorada, eso era todo y en mi cartera solo traía el boleto del metro, eso era todo, se la puse en la mano, ella la vio, con un gesto de lastima, compasió o no sé qué fue, me la regreso, algo murmuro, tal vez dijo: ¡No mames, pinche jodido! Pues que esperaba un adolescente que iba a trabajar como cerillo hasta la Colonia del Valle ¿cuánto dinero puede tener? Bueno en ese momento porque ya por la tarde que regresaba a casa la cartera ya rebosaba algunos billetes de $2,000.00 y de $5,000.00 de aquellos viejos tiempos, pero ya nadie se subió asaltar y para que no me dijeran ¡jodido! 

La siguiente ocasión ocurrió unos años más tarde venía yo de la escuela, era viernes por la noche, el Periférico allá por la zona de Santa Mónica, estaba hasta el ‘queque’, es decir hasta la madre, tráfico lento, había llovido, por consecuencia encharcamiento, pues bien yo venía en ese tiempo con un walkman (Sony), y escuchaba un casette de  Billy Joel Greatest Hits Volumen 1,

cinta que me había costado conseguir porque para esos tiempos no había muchas en circulación el caso es que el “Chompiras” en cuestió subió solo, pero con pistola en mano y de la manera más amabale dijo: ‘¡aflojen o va valer madre!’, al chofer le advirtió: ¡no hagas iris! Eramos pocos los que veníamos en el micro, una chica volvió a caer en pánico, así que no pudo evitar el llanto, otros amigos pues ante el frió y lúgubre ojo del cañón de la pistola no había porqué hacerse el valiente, en lo que llegaba a mi sitio alcancé a sacar el casette, ya no pude quitarle las pilas –el wey se fue con nuevas--, pero mi casette no lo perdí, tuve que pagar los audífonos porque no eran míos  aun recuerdo la mirada del bribón como agradeciendo la cooperación y creo que hasta una mueca de aprobación me ofreció, ¡hijo de su… En fin!

En otra ocasión estuve presente de un atraco fallido de una runfla de carteristas que aprovecharon el sobre cupo del microbus para realizar su robo, eran varios reconocí al menos cuatro individuos que tenían como estrategia tirar cosas para que en ese movimiento o acomodo centrararas la atención en acomodarte o abrir espacio para que recogieran las cosas, ese caso fue unos boletos del metro, mientras los otros “monos” hicieran su labor de manos de seda, pues bien yo iba de pie, en esa ocasión llevaba el sueter amarrado a la cintura, por lo que con ello era dificil que me pudieran sacar la cartera del bolsillo posterior del pantalón, afortunadamente pude bajar pronto, así que ya no supe si lograron consumar su misión.  De los otros atracos que sufrí ya será materia para otra introspección. 

Despues de tanto rollo, volvamos al caso de los ‘Justicieros de la Combi’, todo lo anterior descrito pone en contexto la reacción natural de quienes deicidieron darle sus cates el ladrón quien, resulta que era un guardia de seguridad, exchafirete es decir: ¡Ya se la sabía! El ejercicio que haré es toda la carga cultural-educativa-psicologica-lingüistica que tiene el mexicano hasta en mometos como éste.

En el video que circuló en las ‘redes’ se alcanza a leer en la parte superior: 2020-07-31 / 17:21:57 / 37km/h, en la parte inferior se lee: 19. 33. 32770N / 98. 56. 18600W (lo cual infieron son coordenadas)  en el se ven a cuatro pasajeros, dos ellos que van asiento detrás del conductor observan sus telefonos celulares, un pasajeron con playera azul está asido del tubo que sirve de seguridad por aquello de los enfrenones y uno más en donde solo se ve su gorra con el logo de una bebiba energética llamada Monster que segundos más adelante se ve que escucha música –eso parece—pues lleva sus adifonos puestos; así que es quincena por la tarde, fin de mes y seguramente todos regresaban a casa despues de una larga jornada en esta era atípica de la pandemia creada por el COVID-19.

17:22:09

Para este momento la combi se detiene, se escucha un silbido, obviamente le hicieron la parada, todos los pasajeros reaccionan ante el suceso, y se ve afuera a dos tipos corriendo para abordar, se abre la puerta uno de ellos quien porta una playera al parecer del Real Madrid le da paso a otro tipo quien viste de pantalón gris y playera tipo regata, en donde se ve que está pasado de tamales y tacos, se sube gritando ¡Ya se la saben!

17:22:13

Se avalanza de inmediato con el pasajero de la gorra Monster a quitarle el celular.

17:22:14

Pero La combi se pone en marcha el complice no alcanza a subir y empieza a correr con La combi, me parece escuchar ¡Parate! Da un manotazo a la lamina. Eso hace reaccionar al otro individuo quien piere el equilibrio y empieza a entrar en pánico. Y es que a quién no le ha pasado que cuando el transporte en cuestión no hace alto total o se pone en marcha la reacción es gritar o golpear la unidad para que el chofer reaccione, en este caso que bueno que conductor aceleró.

17:22:16

Para ese momento la combi ya viaja a 9km/h el otro raterillo se quedó atrás a pesar de su esfuerzo por abordar, su compinche intenta bajar y ese accionar le agarra la pierna al pasajero que está más cercano a la puerta. Lo cual, tal vez y solo tal vez, es lo que le hace reaccionar a este amigo, que asalten pero que no te agarren la pierna. Y entonces le bloquea el paso. Lo agarra de la mano y le mete unos ‘patines’. 

Antes de continuar habrá que explicar la geografía de la combi y la función de los pasajeros que ocupan el asiento que está detrás del chofer, los que se sientan ahí generalmente cuatro son quienes tienen la misión de pasarle el pasaje al chofer, y de anunciar la trayectoria: subio en… y baja en… quien está mas cerca de la puerta tiene que ser todo un gentleman ya que tiene que ayudar a bajar o subir a las damas, a los niños o a la gente de la tercer edad, eso parte de la misión, pero que un ‘caco’ te agarre la pierna eso si enchila

17:22:18

Y es ahí donde reaccionan todos, ¡agarrenlo, agarrenlo!, se escucha. Y el de la gorra Monster recupera su equipo que parecía ya había peridido, de pronto el señor de la player azul se muestra y se ve que trae cubreboca y no se lo despoja, ¡claro es pandemia!, sale a escena otro señor de camisa azul y manga larga que porta una mochila Nike, quien antes de entrar a la “cámara hungara” primero acomoda su mochila; otro aspecto de nuestra cultura dejas lo que estas haciendo para poder empezar otra labor, eso es lo que nos decían en casa. 

17:22:22

En ese instante ya tiene sometido al asaltante y sale a escena otro pasajero quien viste una chamarra roja y su cubrebocas, La combi ya viaja a 31km/h es decir el secuaz ya quedó varios cientos de metros atrás, mentándosela al chofer y tal preocupado por su compa quien ya recibió varios trancazos de cinco pasajeros.

 17:22:25

Entonces empiezan las patadas, el vehículo ya alcanzó los 40km/h y el primero de muchos consejos le gritan: ¡Hijo de tu pinche madre ponte a trabajar! 

 17:22:28

El pasajero que estaba al lado de la puerta tras frenar la huida ya con el auxilió de los demás, guarda su teléfono, no vaya ser que lo extravié. El ladrón se defiende como gato bocarriba, pero el clan justiciero piensan en voz alta: ¡No lo dejen parar, no lo dejen parar! 

 17:22:34

La Combi hace alto, el pasajero de la chamarra roja, quien solo era espectador, brinca la escaramuza abre la puerta, en tanto que el Señor de la playera azul toma un respiro, baja de la unidad junto con el joven y le gritan: ¡Hablenle a la tira!

 17:22:40

Dos pasajeros bajaron, cuatro le están dando su felpa al “amante de lo ajeno”, ¡sujetalo! Dice uno, ¡Órale culero no mames! Le dicen con rencor.

 17:22:45

¡No es que a mi me traían! Grita mientras recibe golpes y patadas por mayoreo. 

 17:22:50

¡Muchos güebos, no güey! Le dicen en lo que le recetan más y más ‘amanzalocos’, mientras uno el pasajero de la chamarra roja observa, se supone que el otro busca alguna patrulla que circule por la zona, para ubicarnos esto ocurrió en el trayecto de la via México-Texcoco, es decir no había ningún ‘azul’.

 17:22:53

¡Pinche ratero culero! No se ve, pero el Compa de la Monster lo tiene agarrado del cuello y con la derecha le propina varios golpes, en tanto que los otros buscan espacio para sacar todo su coraje, el señor de la sudadera guinda ha propinado varias patadas, el de camisa azul patadas y puñetazos, y el amigo de la chamarra verde diversos patines de distinta intensidad. 

 17:22:58

¿Me traían perro?

 17:23:01

¡Me traían tu puta madre! le recalcan mientras recibe más golpes.

17:23:04

¡Pinche ratero culero! Le vuelven a decir, mientras que de abajo le vuelven a espetar, ¡Pongase a trabajar hijo de su pinche madre! 

 17:23:05

En eso el Valedor de la Chamarra verde busca un nuevo ánugulo para impartir justicia.

 Esto ya se convirtió en un ring en donde los luchadores técnicos cansados de los rudos se unen para derrotar a quienes siempre buscan salirse con la suya, de aquellos que hacen y nunca la pagan, es el momento en que unos tipos que regresan de chingarle, que tienen que viajar una dos horas para conseguir para el sustento del día se pueden desquitar de ese tipos que consideran que atracar es la solución. 

17:23:09

Se vuelve a asomar el señor de la camisa azul, tal vez frustrado porque no hay policias que acudan y suelta otros cates más, el pasajero de la chamarra roja solo atina en observar azoradamente.

 17:23:12

Al no haber autoridad el pasajero de la chamarra roja, sale de su espasmo y sube a darle su merecido al caco, quien lastimeramente grita ¡Ya estuvo, ya estuvo! 

 17:23:17

Ya no ve lo duro si no lo tupido y grita ¡Yo no les quité nada! 

 17:23:18

Eso enardece a los Justicieros, que arremente con el ladroncillo en desgracia. Patadas, piquete de ojos, golpes; ¡surtido como en miscenlanea!

 17:23:27

Para este momento ya solo son cuatro los Justicieros, la Combi sigue detenida y ponen al caco en uno de los asientos (el de los castigados se le llama en ese tipo de transporte) y le llueve una andanada de ‘caricias’.

 17:23:40

El Caco ya perdió uno de sus tenis y pide que se lo pasen, el chofer quien ha estado observando por la ventanilla por donde le pasan el paje, se asoma tímidamente, esperando una señal de arranque, el ratero en desgracia intenta un escape, pero es imposible, le dicen: ¿A dónde vas, no que muy verga? 

17:24:00

Intenta de nuevo el escape y grita nuevamente ¡Ya estuvo!, lo cual enardece de nuevo a los Justicieros, en ese instante de nuevo La combi se pone en marcha. 

17:24:09

Se escucha un muy lastimero: ¡aaaaaay! ¿Ora si ya?, le preguntan ¡Yaa!, responde! 

Otra cámara de otra compi graba como el Compa de la Monster le quita el pantalón al Caco, quien yace noqueado, vapuleado tras su frustrado ataque lo que recuerda mucho a la escena de la película El Infierno en donde Beni (interpretado por Damian Alcazar) le coloca un sombrero de embudo a un ejecutado que está recargado en un cactus al tiempo que El Cochiloco (Joaquín Cosío) le dice: Pinche Beni eres un poeta. 



Claro las imágenes dicen que mil palabras y acusénme de analista superficial y banalizar lo que ahí ocurre, pero lo que se ve ahí es la cultura luchística del mexicano, las costumbres de la educación de nosotros, lo que al final sucede es que en este año en que todo lo que ha ocurrido, ocurre y ocurrirá es de verdad una fantasía distópica en este México en donde esos pasajeros que regresan a casa en quincena en una época de una emergencia sanitaria, vieron en este pobre tipo la oportunidad de sacar ahí todas las frustraciones. ¿Justificable? Habrá quienes dicen que no, otros tantos que sí, lo más optimistas dicen que hay que levantarse temprano para trabajar y no robar, algunos analisis tienen sólidos sustentos científicos otros no tanto, como el mamotreto que hoy he tecleado.
 
Lo que si puedo decir es que en aquellas ocasiones en donde me asaltaron, si me quedé con ese coraje, de sentir la impotencia de no poder hacer nadar por el riesgo que el asaltante o ‘asaltanta’ quien porta un arma en un momento de pánico jale del gatillo, yo me quedé con mi moneda de $1000.00 y con mi casette, pero sí, ¡Qué pinche coraje! Loa a los justicieros de La combi.




Comentarios

  1. Interesante reflexión y muy atinada... Y la pregunta sigue siendo sera justicia manchades o simplemente una conjugación del todo 🤔😘

    ResponderEliminar
  2. Que claro la mejor de todo esto fue la canción..... Jijiji

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares