Entradas

Mostrando entradas de 2020

Loas a los Justicieros de la Combi

Imagen
Ya pasaron algunas semanas –para ser exactos ya un par de meses-- cuando en las benditas/malditas redes sociales se difundió un video, se viralizó dirán los neolingüistas, de como unos pasajeros le pusieron una “bonita madrina” a un ‘caco’ sin suerte, mientras la mayoría festejaba que se hiciera justicia por su propia mano a falta de la autoridad, otros intelectuales de escritorio que van desde la sociología-política-psicología-ecomonomía, etcétera, etcétera condebaban la actitud de los pasajeros que según ellos actuaron como viles y salvajes cavernícolas.   Quienes habitamos y recorremos la Ciudad de México, otrora Distrito Federal, ya sea con un domicilio en una de sus populosas y densas colonias-barrios o bien haciendo un viaje mágico y misterioso desde lo muchos conocemos como el Estuche de México , el EdoMex o el Establo de México , como acabo de ver en un ‘meme’ (esos nuevos códigos de comunicación de esta era), sufrimos, padecimos y en ocasiones hasta gozamos de un asalto en...

Nuestro héroe desconocido

Imagen
"Nuestro héroe" en cuestión era, o es, de esas personalidades en donde el talento lo suple con mucho ánimo, eso lo dotaba de un cierto carisma y simpatía, su esfuerzo cotidiano en cada juego era contagioso, en muchas ocasiones eso nos llevó a ganar muchos juegos, desde canicas hasta juegos de beisbol, pero donde afloraba su talento o suerte era en el futbol, seguidor en ese entonces del Cruz Azul, siempre que había oportunidad de jugar siempre pedía ser delantero, la éxtasis de anotar un gol era insustituible para él.  "La de gajos"   Cuando lo conocí, nuestro héroe apenas tenía 10 años de vida, y había sido relegado del equipo --Argentina--, de la calle en la que viví por más de dos décadas, Maravillas, así que siempre que había oportunidad de jugar una cascarita o de retar a otras calles se esforzaba por hacer notar sus habilidades con balón, mismas que eran escasas, era una especie combinada de Gustavo Pedro Echanís-Claude Pagal con un poco, pero muy poco de Enri...

¡Cien años, Doña Teófila!

Imagen
Foto: Martín Ramírez Sandoval Los años de Cosoltepec sueñan vagan, viajan en el aire Y los cien años de Teófila: guitarras acordeones, trompetas lo anuncian Enero de 1924, hace 100 años; hace un siglo mi "Abue" llegó a este mundano mundo y dicen: no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista, pues mis dos abuelos resistieron los 100 años no sé si padecieron todos los males, pero el cuerpo que es el estuche del alma ya los hace eternos. Hace seis años que redacté el texto de mi Abuelita, quien no solo marcó el carácter si no a toda su descendencia, hijas, hijos, sobrinos, nietos, bisnietos y tataranietos, sin duda es referente de quienes somos. Mi abuelo Victorino cumplió el siglo, mi abuela llega a la centuria, después de eso ya todo es un viaje de ida y vuelta de vivencia, de recuerdos, de ser lo que es en la actualidad, la piedra angular de una familia que no deja de crecer y que con seguramente un siglo después en el 2124 recordarán a esa Doña Teófila Hernández ...

El último baile

Imagen
Acabo de terminar de ver el documenta de los Toros de Chicago, ese mítico equipo de basquetbol, comandado por Michael Jeffrey Jordan, de la década de los años 90 del siglo pasado, sin duda me transportó a esos años en que aún era estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en la carrera de Periodismo y Comunicación Colectiva en la entonces Escuela Nacional de Estudios Profesionales Acatlán, hoy FES Acatlán. Al ver esta serie The Last Dance de uno de los deportistas más importantes del mundo es que una de esas finales la pude ver con mi abuelo don Victorino Sandoval Espíndola, ese era su nombre, quien para ese tiempo tuvo que vivir un tiempo en casa de mi madre porque tenía un severo tratamiento en la próstata, dolencia que lo aquejó hasta el final de sus días, el hombre vivió 100 años, son personas que están construidos de esa madera que ya escasea. Cada noche que había juego regresaba presuroso para sintonizar TV Azteca para escuchar la narración de Jo...

Los gustos culposos en los tiempos del Coronavirus

Imagen
Lo sostengo cuando confiesas tus gustos culposos, éstos dejan de serlo. Así que en estos días de confinamiento voluntariamente a la fuerza he explorado algunos recuerdos que parecían sepultados en la memoria, pero esto de no salir a la calle para hacer una vida normal nos ha convertido en animales en cautiverio, extrañamos la libertad de no hacer nada a pesar de no hacer nada, en efecto esto de echar la “güeva” tiene su chiste. Pues bien, uno de los retos era leer, leer y leer, pero al iniciar al Quijote de la Mancha en la búsqueda de la tan mentada cita “…deja que los perros ladren que es señal de que vamos avanzando”, decidí pausar la misión por unos días para tomar fuerza poder terminar las mil seiscientas y pico de páginas de una edición de aniversario, ¡en fin! El estar conectado de manera permanente en la red, durante este cautiverio nos pone al filo de una sobredosis de información, misma que puede generar un coma de noticias falsas, o si lo quieren agringar de la...

Chabacanos en flor

Imagen
A  mi amigo Olafo, que sus  relatos inspiraron este texto Tuvieron que pasar once mil setecientos treinta días, eso sin contar los años bisiestos, fue una larga espera para finalizar el inicio de un sueño largamente anhelado, y entonces todo se hizo realidad .  Aquella ocasión, tal vez verano, a lo mejor otoño, posiblemente primavera o bien pudo ser invierno; ocurrió en la mañana, por la tarde o recién había caído la noche cuando se dio un encuentro furtivo, inocente, malicioso. Hubo miedo, emoción y sensaciones que nunca antes habían imaginado, en ese momento volaron mariposas de concupiscencia; era un primer beso de infantes ¿Precoces? No lo creo; era un deseo anhelado aún para sus cortas vidas, había mucho que recorrer… mucho.   El unir los labios con una chiquilla, de fuerte carácter, algunos la consideraban odiosa, pero para él, ella era su sueño, rubios cabellos, delgada figura que ya dibujaba sensualidad, mirada estricta y a la vez cál...